Es falso que un nuevo dispositivo colgante que dice liberar dióxido de cloro denominado Virus Shut Out, funcione de escudo y barrera para proteger a las personas del contagio de la enfermedad COVID-19, como han anunciado diversos vendedores de este producto en redes sociales en México.
Personas que comercializan las tarjetas (promovidas en el mercado mexicano a través de Facebook) lo venden como un dispositivo “de protección personal antiviral y antibacteriano”. Sin embargo, esto no ha sido avalado hasta el momento por autoridades de Estados Unidos e incluso las autoridades ordenaron suspender la venta de estos artículo en Amazon y eBay.
Una de las diversas publicaciones que hacen los comerciantes en Facebook, señala que el producto “elimina gérmenes y virus en el aire circundante”. Lo cual no está comprobado.
Quienes lo promocionan, aseguran que el “solo usar este artículo alrededor del cuello crea una barrera contra gérmenes y virus”. No obstante, no se muestra evidencia de que esto suceda.
Especialistas afirman que no funcionan las tarjetas
Científicos entrevistados por la agencia AFP Fact Check afirmaron que las tarjetas que se promueven eliminadoras de virus no funcionan como protectoras contra la enfermedad COVID-19.
La publicación hecha por Adeng Mayik, periodista de verificación de hechos en África Oriental, señala que Robert Sarafino, consultor en enfermedades infecciosas y microbiología en los hospitales de Barts Health en Londres, afirmó que estas tarjetas que se promueven y se venden en diversas partes del mundo no son efectivas.
“Este producto es falso y se debe prohibir su uso en cualquier parte del mundo”, indicó.
En el artículo, Charles Ochero, especialista en enfermedades infecciosas y microbiología de la Universidad de Edimburgo, no recomienda el uso de estas tarjetas que alegan que protegen contra la COVID-19.
“Esas tarjetas no están probadas en ninguna parte del mundo. No hay evidencia científica de que sean efectivos, ni sobre virus ni bacterias”, dijo a este medio.
Mark Ajak, un investigador independiente en enfermedades infecciosas de la Universidad de Australia Occidental, señaló que las tarjetas que dicen bloquear los virus no son efectivas porque el nuevo coronavirus era demasiado pequeño para ser capturado por el dispositivo.
Probables efectos a la salud del uso del dióxido de cloro
La Organización Panamericana de la Salud (OPS), publicó este 16 de julio que “no recomienda utilizar productos a base de dióxido de cloro por vía oral o parenteral en pacientes con sospecha o diagnóstico de COVID-19, ni en ningún otro caso, porque no hay evidencia sobre su eficacia y la ingesta o inhalación de estos productos podría ocasionar graves efectos adversos”.
En la publicación, la OPS advirtió que el dióxido de cloro (lo que contienen las tarjetas colgantes “escudo” contra la COVID-19 y que se venden en el mercado mexicano) reaccionan de forma rápida en los tejidos humanos.
“Si se ingieren (el dióxido de cloro y el clorito sódico) pueden causar irritación de la boca, el esófago y el estómago, con un cuadro digestivo irritativo severo, con la presencia de náuseas, vómitos y diarreas, además de graves trastornos hematológicos (metahemoglobinemias, hemolisis, etc.), cardiovasculares y renales.
“La disminución de la presión arterial puede dar lugar a síntomas graves como complicaciones respiratorias debido a la modificación de la capacidad de la sangre para transportar oxígeno”, detalló la OPS en el informe que se puede revisar aquí.
En caso de inhalarse, el dióxido de cloro a través de nebulizaciones puede generar edema pulmonar, broncoespasmos, neumonitis química y producir la muerte si las exposiciones están por arriba del valor límite de exposición.
De acuerdo con la OPS, a exposición prolongada al dióxido de cloro puede dar lugar a bronquitis crónica y erosiones dentales.
Y aunque decenas de personas aseguran de manera anecdótica que les funciona, la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de Estados Unidos reportó informes sobre eventos adversos graves en pacientes que han consumido dióxido de cloro, entre los cuales están:
- insuficiencia respiratoria
- alteraciones en la actividad eléctrica del corazón
- hipotensión
- insuficiencia hepática
- anemia
- vómitos